Preocupados por el antiguo cauce del Guadalope

A/A D. Jesús Senante Macipe
Alcalde de Caspe

Caspe, Ciudad del Compromiso, a 15 de julio de 2016

Hace tiempo que con frecuencia se produce la inundación del camino que discurre paralelo al cauce del río Guadalope en el entorno del lugar conocido como La Palanca, de modo que resulta inviable el tráfico de vehículos y personas por ese tramo concreto de camino, con el consiguiente perjuicio para los muchos usuarios. Nuestra organización conoce el hecho, tanto por las quejas de los afectados como por el seguimiento que de tal anomalía venimos realizando.

Podemos aventurar que dichas inundaciones se producen por la concatenación de varios factores que intentaremos exponer:

En el mencionado paraje, tomando el sentido aguas abajo, el camino tiene a su derecha el cauce del río, y a su izquierda, como si de una gran cuneta se tratara, la acequia. La cota máxima de agua embalsada en el enlodado y sucio cauce del río, antes de ser bombeada en el dique, se sitúa a escasos centímetros del nivel del camino, de modo que el agua que circula por la acequia mencionada rebosa con frecuencia y a través del camino desagua en el estancado y pestilente cauce del río.

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Una parte importante del caudal de agua que discurre por la mencionada acequia son aguas que se han de depurar y deberían canalizarse hacia la depuradora en el lugar previsto al efecto, cercano al puente del Ferrocarril. Si así se hiciese, por la acequia en el tramo inundable circularía exclusivamente el caudal propio de las escorrentías de Rimer de Acá. Si, además, los responsables de esa acequia la limpiaran, como corresponde a un eficaz mantenimiento, seguro que no se inundaría el camino.

De lo expuesto se deduce que no hay un único responsable. Los servicios técnicos correspondientes de nuestro ayuntamiento deberán determinar la parte de responsabilidad que pudieran tener ENDESA, por la obstrucción y colmatación del cauce; también, la empresa responsable de la depuradora, por no canalizar –si asi fuere- las aguas residuales hacia esa instalación y así devolverla al río una vez depurada, mucho más abajo del tramo de inundación del camino; por otro lado, los responsables de la acequia Rimer de Acá, por no limpiar el cauce; igualmente, los responsables de la conservación de caminos vecinales, por no detectar y denunciar el problema; y finalmente, el MOPU porque un tramo de esa acequia forma parte del talud de la carretera y es de su competencia.

Después de mucho tiempo, demasiadas inundaciones y demasiados intentos  de muchos con muy buena voluntad pero poco efectivos, la situación se ha hecho insostenible y creemos llegado el momento de abordar seriamente el problema. Es por ello que nuestra organización, que quiere trabajar y trabaja en beneficio de nuestra ciudad, mediante el presente escrito cree colaborar para que nuestras autoridades tomen las decisiones y medidas de su competencia, para evitar que la dejadez de algunos continúe creando problemas a nuestros conciudadanos.

Es petición que le hacemos con la seguridad de que será debidamente atendida como es su norma habitual.

Atentamente,

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