De nuevo comparecen ante los jueces por la mañana de este día los mencionados Francisco Zametla y Vicente Pedrita, abogados de don Federico, los cuales, según manifestación del jueves anterior, hicieron entrega de dos memoriales escritos conteniendo diversos alegatos en defensa de los derechos del mismo.
Momentos después, recibían los compromisarios una carta del Parlamento general del reino de Valencia juntamente con dos escrituras notariales (…).
Momentos después de haber sido leídas la carta-misiva y las actas subsiguientes, presentáronse ante los jueces los más arriba mencionados Francisco Zametla y Vicente Pedrita, abogados del conde de Luna, quienes hicieron entrega de un memorial escrito y conteniendo los alegatos por ellos expuestos de palabra el jueves anterior.
Seguidamente, retirados ya dichos abogados, y convocados en el aula los notarios y secretarios del proceso además de los testigos designados, el arzobispo de Tarragona, en nombre de los nueve, manifestó expresamente que tanto por el orden observado en las investigaciones como en las demás actuaciones de los propios compromisarios, eran plenamente seguros de que ningún perjuicio habíase ocasionado ni creían ocasionar en el futuro a los mencionados Parlamentos de los reinos de Aragón y Valencia y principado de Cataluña, como tampoco a dichos reinos y pricipado; quedando a salvo todos los derechos, prerrogativas, preeminencias y libertades que hasta el presente gozaban, ordenando a continuación a los notarios y secretarios la redacción del siguiente documento (…).
«En nombre de nuestro Señor Jesucrito, sea de todos conocido cómo en el día de sábado a veinticinco del mes de junio (…) Decimos y publicamos QUE LOS MENCIONADOS PARLAMENTOS Y SÚBDITOS Y VASALLOS DE LA CORONA DE ARAGÓN DEBEN Y ESTÁN OBLIGADOS A PRESTAR TRIBUTO DE FIDELIDAD AL ILUSTRÍSIMO Y EXCELENTÍSIMO Y PODEROSÍSIMO PRÍNCIPE Y SEÑOR DON FERNANDO INFANTE DE CASTILLA. Y QUE DEBEN Y VIENEN OBLIGADOS A RECONOCER AL PROPIO DON FERNANDO COMO A SU VERDADERO REY Y SEÑOR (…).