Por la mañana de este día comparecen de nuevo [como en los días anteriores] antes los jueces los predichos embajadores del conde de Urgel, excepto el ya citado Matías Vidal, por continuar enfermo; debido a lo cual, las intervenciones de aquellos fueron cortas, solicitando fueran continuadas el lunes siguiente [el 20 de mayo de 1412 era viernes].
A ello respondieron los compromisarios estar de acuerdo que así se hiciese, puesto que el tiempo urgía «…nam tempus erat arctum et breve…».