Seguro, pero seguro, que muchos de vosotros se ha preguntado alguna vez, viendo el mapa de Aragón, en un libro, en el periódico o en el parte meteorológico, por qué ese pico que de repente sale en la vertical de Caspe, delimitando las provincias de Zaragoza y Huesca. ¿Qué extraña ocurrencia tuvo quien diseñó esas fronteras interprovinciales? ¿Qué es ese caprichoso apéndice?
Para los que no lo sepáis, hoy os descubrimos que ese paraje recibe el nombre de «la punta del morterón». Nos hemos acercado con Sergio, socio y amigo, trabajador del retén antincendios, quien amablemente nos conduce hasta el mismo vértice, la puntica de laese apéndiz que vemos rodeado en el mapa. Y, sobr e el terreno, aún es más curioso, porque el punto está físicamente representado con una piedra, «plantada» a modo de totem. Una piedra en la que convergen tres términos municipales: Caspe, Fraga y Peñalba.
Al parecer, que Caspe conservara ese paraje dentro de un término municipal fue un empeño persona de quien fuera su alcalde, José Garrido, en pleno litigio con Fraga por los montes de Valdurrios.
Nos dice Sergio que, cuentan, que da buen suerte orinar en ese punto y ser capaz de «regar» los tres términos municipales. Y como nunca viene mal tener de cara a los hados…
Alicota



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